un abrazo trae el escalofrío de la fiebre
nada será como ha sido
la certeza de tu tacto se diluye
la ciudad desierto sin arena
emite sonidos nuevos
de ambulancias sin sirenas
de aplausos trepando hasta las azoteas
un abrazo trae el escalofrío de la fiebre
nada será como ha sido
la certeza de tu tacto se diluye
la ciudad desierto sin arena
emite sonidos nuevos
de ambulancias sin sirenas
de aplausos trepando hasta las azoteas
Magnífico, me encanta tanto el texto como la foto, con el juego duplicado de imágenes y palabras
Estoy de acuerdo con Cristina, en especial el poema, que en muy pocas palabras resume cómo era la ciudad -cualquier ciudad- al inicio del confinamiento.