Inicio 9 Poemas 9 Setecientas palabras graves

Setecientas palabras graves

Publicado el 12 de enero de 2025

Hoy, setecientas palabras graves,

lejanas al imperativo sajón,

desafían al olvido,

sellando versos con aromas

de voces errantes,

viviendo, lejos de órdenes,

ajenas a instrucciones.

Solo se entregan al viento,

como un susurro

que roza mis oídos.

Hoy, me es posible,

youtubear a Santa Teresa.

Perdida entre la niebla digital,

su voz recorre, suave,

paisajes áridos de fe,

como plegaria olvidada

de palabras que no tiemblan.

Hoy, el móvil me llama,

voz vana que promete

más de lo que puede dar,

ofreciendo monedas digitales,

como si la redención

se escondiera en un código QR

y embalada en píxeles fríos,

se pudiera vender al mejor postor.

Hoy, en medio de todo,

las setecientas palabras graves

permanecen firmes, como piedras,

sin dueño, sin prisa,

sin más destino que ser,

piedras saltando sobre el agua,

que dejan tras de sí

ondas en la memoria

de lo que jamás perdura.

© Versos de Arturo Joaquín

 

6 Comentarios

  1. Anónimo

    Un poema evocador que juega con la transitoriedad de lo digital y lo eterno de las palabras, donde lo efímero de la tecnología se enfrenta a la solidez de la poesía y la tradición. La yuxtaposición de la voz de Santa Teresa con el llamado del móvil resalta el contraste entre lo espiritual y lo contemporáneo. La imagen de las “setecientas palabras graves” como piedras en el agua es especialmente poderosa, pues refleja cómo las palabras, aunque parecieran insignificantes o olvidadas, dejan huellas en la memoria.

    Responder
  2. Arturo Joaquín

    Los versos del poema “Setecientas palabras graves” surgen al saber que la Real Academia Española de la Lengua (RAE) recoge mas de noventa y tres mil palabras, de las cuales cerca de diecinueve mill son americanismos. El hablante común utiliza regularmente entre cinco y siete mil palabras, mientras que en la comunicación diaria se emplean unas trescientas.
    Nuestro idioma tiene entre un setenta y ochenta por ciento de palabras llanas o graves, aquellas cuya sílaba tónica recae en la penúltima posición. Estas pueden tener dos o más sílabas.
    Siendo optimista, y considerando que unas mil palabras son de uso frecuente, las graves representarían aproximadamente setecientas. A ellas dedico este poema, pues a menudo me facilitan la métrica de los versos.

    Responder
    • I.Simon

      Genial!!!

      Responder
    • Luis Enrique García-Riestra

      Ondas en la memoria de lo que jamás perdura. Excelente poema de Arturo Joaquín, consolidando su escritura de los paisajes habitados por el hombre que siempre observa. Aquí nos gusta como mira el paisaje de las palabras corrientes o extraordinarias de nuestra lengua española, partiendo de su estudio del idioma al que honra. Enhorabuena, Arturo, por tu página y tus palabras.

      Responder
      • Arturo Joaquín

        Sé que siempre estás ahí, leyendo con interés e indulgencia mi cosas. Te lo quiero agradecer especialmente.

        Responder
  3. Milio

    Ye un gustu ver como uses les palabres con sentidu constructivu en unos tiempos nos que lo normal ye disparales como obuses contra l’enemigu.

    Responder

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar

Yo canto a la tarde que se extingue y a sus dioses derrotados

Oh fuego imprescindible oh llama insaciable de este lunes cuando la inercia nada disfraza y la tarde rueda cuesta abajo otra vez bailando si bailando un sincopado swing con el hastío.   ¿Qué puede perdurar? ¿Qué debe perdurar? Cuando en el sofá se abrazan la...

A la orilla de un volcán (dos versiones)

(v.1) Primera versión de "A la orilla de un volcán"    Ahora te invoco Gurugú, desde tu orilla. A ti, que miras hacia la frontera del mar. A ti, volcán dormido con lava en la garganta, te invoco ahora Gurugú, desde tu ladera sentado y pensando a solas.   Me...

Mensaje de voz

Un paisaje árido   y la niebla helada, bordean invisibles el fondo de tu mensaje. Voz cencellada, forma del hielo sobre la hojas bruma difuminada, blanquecina, susurran los colores del arco iris. Traen retazos de lo que no fue, suspendidos en el pulso  de lo...