Querido Walter:
A la plaza conducían una maraña de calles que durante años evité. Cuando mi madre se instaló en una de ellas, fue como si en su ventana hubiese un faro que seccionara la fuente con haces de luz.
Dear Walter:
A tangle of streets led to the square that I avoided for years. When my mother installed herself in one of them, it was as if there were a lighthouse in her window that sectioned off the source with beams of light.
© “Echando un cigarrillo en la Plaza rosa y dorada” “Cigarette break at the pink and golden Square” obra de Paco García.
© Texto de Arturo Joaquín.
Y por el mismo haz, la fuente me devolvía notas musicales de agua.
Su magia persiste y su luz se multiplica.
Los poemas son como calles que la fuente convierte en canciones.
Que el silencio no habite tus calles.