Yo canto a la tarde que se extingue y a sus dioses derrotados V.2
Oh fuego imprescindible oh llama insaciable de este lunes
cuando la inercia nada disfraza
y la tarde rueda cuesta abajo otra vez
bailando si bailando un sincopado swing con el hastío.
Oh dioses extinguidos en una tarde que se desmorona,
fuisteis leopardos entre llamas de laurel y serpientes
soñando con el estertor opaco de vuestras víctimas
y ahora sois ceniza flotando sobre la niebla del día.
Si las horas con sus garras retráctiles y tenaces
rompen las cuerdas del arpa ciega
y bajan las persianas sobre los meridianos del hielo
qué puede perdurar qué debe perdurar.
Si en el sofá se abrazan el buen rollo y la crueldad
con el latido incierto de nuestra supervivencia
sin los besos en el asiento trasero del coche
Yo quiero cantar a lo perdurable en esta hora desnuda de piel
canto a su olfato perdido capaz de tener memoria del humo
canto a su tacto ciego tropezando en el carbón de las palabras
canto a su voz virginal escondiendo estrellas en la ceniza.
Yo canto a la tarde que se extingue y a sus dioses derrotados V.1
Oh fuego imprescindible oh llama insaciable de este lunes
cuando la inercia nada disfraza
y la tarde rueda cuesta abajo otra vez
bailando, si bailando un sincopado swing con el hastío.
¿Qué puede perdurar? ¿Qué debe perdurar?
Cuando en el sofá se abrazan la empatía y la crueldad
con el latido incierto de nuestra supervivencia,
sin los besos en el asiento trasero del coche.
¿Qué debe perdurar? ¿Qué puede perdurar?
Si las horas con sus garras retráctiles y tenaces
rompen las cuerdas del arpa ciega
y aciertan a bajar las persianas sobre los meridianos del hielo.
Yo quiero cantar a lo perdurable en esta hora desnuda de piel
y canto a su olfato perdido capaz de tener memoria del humo
y canto a su tacto ciego tropezando en el carbón de las palabras
y canto a su voz virginal escondiendo estrellas en la ceniza.
Oh dioses extinguidos en una tarde que se desmorona,
fuisteis leopardos entre llamas de laurel y serpientes
soñando con el estertor opaco de vuestras víctimas.
Oh mi vida oh vida que se desgarra contra el horizonte,
volviéndose eterna entregándose al arrullo del tiempo
y no permitiendo a nadie profanar la nieve.
¡Oh mi vida sin vida!
© Versos de Arturo Joaquín
Este poema es un ejercicio para explorar las posibilidades del verso libre. He buscado crear un poema original que refleje mi voz con autenticidad y libertad, abordando una cuestión de fondo. Experimento con la forma, la longitud de los versos y la disposición de las palabras, a partir de mi poema “Ocho de mayo del dos mil veintidós”.
“El secreto está en escribir en el borbotón, en la pulsación del instante, en la abundancia del momento. Anotar sin deliberar, sin preocuparse por el estilo, sin esperar el tiempo o el lugar perfectos.
Siempre trabajé así. Tomaba el primer papel que encontraba, me sentaba en el primer escalón, en la primera mesa disponible y escribía, escribía, escribía.
Ninguna pintura preparada, ningún poema pulido, ninguna historia revisada puede ser lo que ese primer impulso es. Lo que uno quiere es capturar el espíritu inicial, estar en sintonía con su nacimiento.
Escribir es atrapar el instante en el latido mismo de la vida”.
Hola, gústame el ritmo y la capacidá que tienes pa crear imáxenes de enorme fuerza plástica: “Si las horas con sus garras retráctiles y tenaces / rompen las cuerdas del arpa ciega”.
Oh mi vida oh vida que se desgarra
contra el horizonte,
volviéndose eterna
entregándose al arrullo del tiempo
y no permitiendo a nadie profanar la nieve.
¡Oh mi vida sin vida !
No siendo, como no soy, gran lector de poesía, consigues que no sea costoso leer los tus poemas y aunque tengo la cabeza a grillos y siempre tengo doscientes coses que me llamen la atención, préstame, de vez en cuando, echar una güeyada a los tus escritos y eso, debe significar algo.
Un abrazu.
Milio